Según especialistas, no hay mucho de qué preocuparnos ya que en muy pocos casos el hipo esconde detrás una enfermedad crónica o una alteración grave en la salud de bebés y niños.
• Durante la lactancia, la mamá debe procurar que el pezón esté completamente dentro de la boca del bebé, para que no entre aire en cada succión.
• Después de darle pecho a su bebé, no se olvide de dejarlo en posición vertical para facilitar la eliminación de aire.
• Evite los cambios bruscos de temperatura.
Cuando el hipo persiste durante 24 horas es necesario acudir al médico, debido a que podría ser señal de meningitis, otitis media, un cuerpo extraño en el oído, bronquitis o asma.